inmoral
Mi madre aún no la recibe en su casa, siempre me cambia la conversación cuando sale a relucir el tema. Ni siquiera es capaz de mirarme a los ojos en esos momentos. Transforma su expresión facial, se pone hacer cualquier cosa y comienza a hablarme de los planes de la boda de su hijastra. Eso le hace mucha ilusión y yo no le insisto. Nunca lo hago, no impongo nada, me dejo llevar. Mi padre fue el de la idea de invitarla estos días, según me dijo tenía curiosidad por conocerla. Esto sí que no me lo esperaba. Cuando llegamos la miró de arriba a bajo y le dio un amable beso en la mejilla. Sé que le gustó, ella provoca esas reacciones. A mi me miró de forma burlona, y me alborotó el pelo con una mano. Nunca me besa, pocas veces me mira. La conversación de los tres fue corta. Mi padre tenía que salir a resolver algunas cosas, nos dijo que disfrutáramos de la casa y que ya en la cena compartiríamos un rato agradable.
Durante el tiempo que estuvo fuera, aprovechamos para darnos un chapuzón en la piscina y fumar yerba. Estaba preciosa en su traje de baño azul turquesa, con el pelo mojado y los pezones erectos. Aspiraba el humo profundamente y lo exhalaba al rato en una sonrisa. Yo me dejaba invadir de sensaciones relajantes. En cada bocanada me iba sintiendo como en la gloria y mis pensamientos se volvían atrevidos. Cada poro de mi piel estaba en alerta y solo verla me erotizaba. Ella era mi fantasía, sus travesuras me divertían y me tentaban. ¿Qué me importaban las apariencias, la moral o las buenas costumbres en el preciso momento en que dejaba los senos al desnudo? Nada. Que me condenen si quieren, que me rechacen todos. Poco me importa, porque mi lugar en el mundo está entre sus piernas. Nunca me cansaré de lamerla, de probar sus jugos con sabor a manzanas en miel caliente. Puedo morir feliz mientras tengo su clítoris en mi boca. Es cuando deseo tragarla por completo, llevarla dentro de mi y así poder ser todo lo que quiero. Hacerla gozar es mi principal objetivo. Vivo para esos momentos y esos momentos son mi vida. Se agitó descontrolada sobre mi cara, le hundí la lengua profundamente y sus gemidos me enloquecieron. Fue un viaje, un viaje que hemos compartido muchas veces. Si esto es transgresión tengo fe en que el cielo lo perdonará.
Durante la cena hablé poco. No sé si fue la marihuana en la tarde o el vino que tomamos con la comida, pero tenía muchas ganas de dormir. Ellos conversaron animadamente, mi papá la hizo probar varios tipos de vino y ella estaba muy interesada en las historias que él le contaba de cada uno. Decidí irme a la habitación y dejarlos compartir, antes le dije que la esperaría allí. Me dedicó una brillante sonrisa, y mi padre le pasó el brazo por los hombros y también sonrió. Mi padre tiene una sonrisa enigmática, como todo él. Nunca puedo tener certeza de qué es lo que piensa. Me resulta a veces como un desconocido, no logro descifrarlo. Me parece siempre tan distante, solo cuando me prepara desayuno lo siento cercano, y hasta lo quiero.
Extrañé se peso en la cama, y el olor de su cabello, aún así me dormí enseguida. No sé por cuanto tiempo estuve sin ella. Mal durmiendo hasta que decidí levantarme y buscarla. La necesitaba. Caminé despacio hacia la sala, de alguna forma ya imaginaba lo que iba a ver, pero no por eso dolió menos. Ella estaba allí en el sofá. Gimiendo bajo el cuerpo de él, su boca abierta y un hilo de baba saliendo de sus labios. Los sonidos que emitían sus cuerpos al juntarse, hacían eco en mis oídos. Si tan solo alguien apagara todas las luces, para no ver más, para que esto no se me grabe en la memoria como se está grabando. Que quien sea le de pausa a la acción y los cuerpos cesen de moverse, y él deje de entrar y salir de ella, y que ella deje de gemir. No quiero escuchar cómo él le pregunta cosas, no quiero escuchar lo que ella le contesta. No quiero que sean él y ella. Ella y él, no.
Hubiera querido gritar, chillar, arrojar cosas, golpearlos. No lo hice.
Durante esta mañana, desayunamos los tres en silencio. Mi padre nos ha preparado pancakes. A cada bocado voy recordando la noche anterior. Luego de verlos me alejé trastabillando hasta mi habitación. Me tiré en la cama. Ni siquiera podía llorar. Siglos después ella llegó, aún sudorosa, con el pelo pegado a la frente. Hermosa. Se acostó a mi lado, puso su cabeza en mi brazo y su mano en mi vientre.
-Sé que nos viste. – dijo.
Me mordí los labios cuando empezó a acariciarme.
– Sé que nos escuchaste.
Lamió mi cuello y se incorporó sobre mí.
– Sé que estuviste ahí.
Puso su manos en mi entrepierna y restregó sus pechos contra los míos.
– Te amamos.
Me desvistió poco a poco. Besándome cada pocos centímetros de piel y yo me dejé hacer.
Imagen: Severia
21 Comments:
solo voy a opinar que no puedo opinar.
John
Glifo, es mi primera vez en tu pagina y tengo que decirte que me ha provocado una mezcla de sensaciones. Pase por los archivos y ha sido un deleite total. Te seguire.. =)
Saludos desde PR
Wow, esta fuerte, y concuerdo con tinkerbell, fue una mezcla du...para mi dulce y amarga. Especificamente esta parte me trajo gratossssss recuerdos: "Puedo morir feliz mientras tengo su clítoris en mi boca. Es cuando deseo tragarla por completo, llevarla dentro de mi y así poder ser todo lo que quiero. Hacerla gozar es mi principal objetivo."
El final como que lo vi , venir. Es como que te quedas boquiabierta.
Pero me gustó muchisimo, estas brutal, super talentosa. Saludines
yo otra vez...todavia estoy mareado del recuento... en el sentido y las reglas que rompes poeticamente.
john
Wao Glifo. Me dejaste sin palabras, aun estoy en shock. Me encanto como llevaste el cuento. Todas esas mezclas de sentimientos, de sorpresas. Vas a llegar lejos, muy lejos!!
Un beso!!
@_@
erotismo doloroso
totalmente impresionado...
y se lo dice alguien que oye historias diariamente....
felicidades...
saludos desde la tierra de la natilla fresca...
Me encanto...desde ya te puse en mi blog...exitos!!!
Qué fuerte...
Un silencio solemne,
y un beso.
Glifo:
sólo faltaría poner la fecha de estreno, previo cásting de los actores, y esta historia que has narrado, sobre la cual te otorgo el beneficio de la duda para saber si es ficción o realidad, bien podría haber sido como esa peli que transucrrió ante mis ojos, con ese relato impecble, las imágenes vívidas.
Parece ver en acción a cada uno de los personajes (o personas reales) descriptos.
Vas avanzando a pasos agingantaods con la narrativa, sigue el camino al que tantos le temen , o escibe otro estilo de expreiones, pero no abandones tu arte, lo llevas con banders en alto,y en mar abierto.
Unu fuerte abrazo.
Tu sensibilidad y sensualidad en tus relatos son...wow! Hace tiempo que no me transportaban de esa manera. Disney mental.
John
otra...
Cometa
A toda velocidad
me acerco a tí,
perdido por completo
en esta pasion
esclava del tiempo.
...dejando un rastro
de esta luz
que me fulmina,
me voy diluyendo
en las memorias
de tu destino...
Vertiginosamente
me precipito
a las esferas silenciosas
de tu ser,
para seguir mi ruta
en este pequeno espacio
de tu querer.
He sentido deseos de..., no lo dire, pero ¡cuanto deseo!
Genial chiquilla!
Por aquello del entretenimiento.
El Eco
Te grito
desde mis orillas,
al horizonte
de tus oidos.
Te llamo
desde mis arrecifes,
a las alturas
de tus ojos.
Susurro tu nombre
al final del precipicio,
para encontrarme
acompanado del vacio.
Y solo encuentro
en la acustica
de tu corazon,
la respuesta
de mi perdida voz.
GLIIIIFOOOOO!
Reitero lo mucho que me impresionas; lo digo a los cuatro vientos, pase lo que pase, termine la cosa como termine: eres mi preferida.
Muy hilvanado, muy ilustrado.
El tono seco y sin miedo te queda muy bello. Erotismo, en el punto.
Grandioso relato que hace later nuestras escondidas sensaciones.
Te seguiré leyendo. Adelante.
Me encanta como llevas las situaciones a un límite donde el personaje, en vez de hundirse, proyecta esa "frialdad" (por llamarle de alguna forma)que te deja saber que realmente siempre fue cómplice de lo que le creímos ser víctima.
Siento que la parte donde la encuentra con el papá, aunque díficil de esconder, debe ser camuflajeada un poco más... aunque no es esta parte el clásico punto en donde giras el cuento, sino cuando se incorpora el diálogo.
Glifo, como siempre excelente!
Saludos, Siumell
He estado leyendo a E.M.Cioran, sus aforismos de angustia existencial son pegajosos atrapamoscas en las que mis alas han quedado adheridas por más de un mes... hoy he leído tu relato. El shock me ha liberado.
Un abrazo.
me gusta la pasion descarnada con la que dibujas las cosas, los cuerpos, las sensaciones... me gusta chocar contra tus palabras.. wow...
Vaya! Coincido con Antagónica. Leí esto y he sentido deseos. Me provocaste cosas. Mientras leía pensé en muchas más; muchos finales, muchas salidas. Nada como este final. Que fuerte. Pero que rico leerlo. Te cuidas.
"Que me condenen si quieren, que me rechacen todos. Poco me importa, porque mi lugar en el mundo está entre sus piernas."
Totalmente exquisito, excitante, provocador y chocante. Me recordo los escritos que publica la Editorial La Sonrisa Vertical de TusQuets. Una muy buena narrativa. Espero seguir leyendo escritos asi..me fascino...wao..cuidate..
uff! que fuerte...muy bien llevado y manejado.
o de cuando las palabras irrumpen, no aparecen. genial selección de ellas.
Saludos
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